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Diseñador/a industrial de envases
Descripción
El diseñador industrial de envases se encarga de diseñar y desarrollar técnicamente cualquier envase o contenedor de un producto líquido o sólido.
Habitualmente realiza proyectos para empresas de gran consumo en el sector de la alimentación, bebida, perfumería, cosmética, higiene, detergentes, etc. En estos proyectos, al igual que en los de diseño gráfico de packaging, el enfoque de marketing tiene una gran relevancia.
Partiendo de unas necesidades industriales, unos objetivos específicos de presencia en el punto de venta y unas exigencias de logística, comunicación y posicionamiento, el diseñador ideará y ejecutará un envase que responda a todos esos parámetros, potencie la imagen gráfica que se vaya a aplicar y destaque en el lineal del punto de venta.
Tareas
- Análisis del proyecto, la empresa y el mercado.
Antes de iniciar el proyecto, el diseñador analiza el briefing o documento donde se especifican los objetivos de diseño, el posicionamiento del producto y de la empresa cliente y el usuario y, por último, la competencia más directa.
Los proyectos de envases acostumbran a tener muchos condicionantes o requerimientos: los procesos industriales de la propia empresa, los materiales de producción, la logística y almacenaje, el transporte, el contenido del envase y sus características, la sostenibilidad medioambiental, etc. El diseñador debe conocer, y por tanto investigar, los objetivos del proyecto que van desde que el envase se apile perfectamente, tenga un facing importante para poder colocar la parte gráfica, aparente más capacidad de la que tiene, esté dotado de una ergonomía y usabilidad especial, sea innovador en la dosificación o en la apertura del envase, etc. - Anteproyecto de diseño o elaboración de las primeras hipótesis.
El diseñador de envases realiza diferentes propuestas creativas con renders en 3D y muestra las diferentes vistas del envase necesarias para comprender el anteproyecto: vista frontal, superior, tres cuartos, etc.
Si es necesario, simula una imagen gráfica aplicada al producto, y aporta también unos primeros detalles técnicos así como planos acotados con medidas generales. - Proyecto de diseño.
Una vez que se selecciona la vía sobre la que se va a trabajar, introduce los posibles retoques y desarrolla el proyecto técnico. En esta fase, el material que se acostumbra a entregar son planos de detalle y de conjunto, una memoria técnica constructiva y maquetas de volumen, si fuesen necesarias. - Seguimiento de la industrialización del proyecto.
Realiza el seguimiento de la industrialización y la preserie (si existe), soluciona y realiza los eventuales cambios que pudieran necesitarse.
